El Mercado Municipal de Jesús, ubicado en el emblemático barrio de Patraix, pronto será sometido a una importante renovación que busca solucionar problemas estructurales que han afectado su funcionamiento durante años. El Ayuntamiento de València invertirá casi 450.000 euros (433.726,01 euros) en la reparación de la cubierta y las bajantes del mercado, con el objetivo de mejorar las condiciones de este espacio esencial para la comunidad.
Fin a las goteras y mayor eficiencia energética
El problema de las goteras en el Mercado de Jesús no es nuevo. Desde hace años, las filtraciones han afectado a los puestos de venta, especialmente a los situados en la zona de la calle Jesús, lo que ha causado molestias tanto a comerciantes como a clientes. Según el concejal de Comercio y Mercados, Santiago Ballester, las goteras también han representado un peligro al afectar los contadores eléctricos, un riesgo que debe ser eliminado cuanto antes.
La solución llega con la instalación de una nueva cubierta de 1278,19 m², que se ubicará sobre la existente. Esta nueva estructura no solo pondrá fin a las goteras, sino que también dotará al mercado de un mayor aislamiento térmico y acústico, lo que beneficiará tanto a los trabajadores como a los clientes. El concejal ha destacado que este aislamiento mejorado hará del mercado un lugar más confortable, reduciendo tanto el ruido exterior como el impacto del calor y el frío en las diferentes estaciones del año.
Un proyecto aprobado y en marcha
El pasado mes de julio, la Junta de Gobierno Local aprobó el proyecto que da inicio a esta necesaria intervención. El grueso de las obras se centrará en la instalación de la nueva cubierta, pero el plan también contempla la reparación de las bajantes, que han presentado fugas en su conexión con el canalón y han contribuido a los problemas de filtración de agua.
La inversión total para este proyecto asciende a más de 433.000 euros, una cifra considerable que refleja el compromiso del Ayuntamiento con la seguridad y la conservación de este mercado histórico. Las obras tendrán una duración aproximada de cuatro meses, tiempo durante el cual el mercado continuará con su actividad habitual.
Un mercado en funcionamiento durante las obras
Una de las mayores preocupaciones de los comerciantes y clientes era si las obras interrumpirían la actividad del mercado. Afortunadamente, el Ayuntamiento ha garantizado que el mercado seguirá funcionando con normalidad durante todo el proceso de renovación. Para lograrlo, los trabajos se realizarán en fases, evitando, en la medida de lo posible, intervenir durante el horario de apertura del mercado.
Este enfoque asegura que los casi 70 puestos de venta continúen ofreciendo sus productos a los vecinos y vecinas de València sin interrupciones significativas. La organización de las obras ha sido diseñada de manera que se minimice el impacto en el día a día del mercado, un lugar clave en la vida del barrio de Patraix.
Un edificio de arquitectura vanguardista
El Mercado Municipal de Jesús no es solo un lugar donde hacer la compra, sino también un edificio destacado por su arquitectura vanguardista. Su diseño moderno y funcional contrasta con su historia de décadas al servicio de la comunidad, convirtiéndolo en un punto de encuentro para los vecinos y un espacio donde se vive el día a día del barrio.
Con casi 70 puestos de venta, el mercado es un referente en València, ofreciendo una gran variedad de productos frescos y de calidad. La intervención en la cubierta y las bajantes no solo mejorará la seguridad y funcionalidad del mercado, sino que también permitirá que el edificio mantenga su atractivo arquitectónico mientras se adapta a las necesidades actuales.
Un futuro más seguro y sostenible
Una vez completadas las obras, el Mercado de Jesús será un lugar más seguro, eficiente y sostenible. La nueva cubierta no solo protegerá el edificio de las inclemencias del tiempo, sino que también permitirá un mayor ahorro energético gracias a su aislamiento térmico. Esto reducirá los costes operativos del mercado y mejorará la experiencia tanto para los comerciantes como para los clientes.
Por otro lado, la reparación de las bajantes evitará futuras filtraciones y problemas de humedad, lo que contribuirá a la conservación del edificio a largo plazo. En resumen, esta intervención es una inversión en el futuro del mercado, que podrá seguir siendo un espacio de referencia en el barrio de Patraix durante muchos años más.
