La sequía extrema que afecta a la Comunitat Valenciana ha puesto en riesgo no solo las cosechas, sino también la supervivencia del ganado. Ante esta situación, la Conselleria de Agricultura, Agua, Ganadería y Pesca ha desplegado un plan de emergencia que ya ha permitido distribuir 7 millones de litros de agua a explotaciones ganaderas de las provincias de Castellón, Valencia y Alicante desde el 29 de julio. Este esfuerzo se centra en paliar los efectos devastadores de la falta de lluvias y garantizar el bienestar de las reses.
Un esfuerzo por salvar el sector ganadero
El conseller de Agricultura, Ganadería y Pesca, Miguel Barrachina, ha destacado la importancia de esta medida, subrayando que «el objetivo es paliar los efectos negativos que está provocando la situación de sequía extrema y mostrar todo nuestro apoyo al sector ganadero». Esta iniciativa no solo busca aliviar la presión sobre los ganaderos, sino también asegurar la continuidad de un sector vital para la economía y la cultura de la Comunitat Valenciana.
De los 7 millones de litros de agua distribuidos, la mayor parte, 6 millones de litros, se ha destinado a las explotaciones ganaderas de la provincia de Castellón, donde la situación es especialmente crítica. En comparación, la provincia de Valencia ha recibido 668.000 litros y Alicante 200.000 litros, reflejando las necesidades diferenciadas según la geografía y la severidad de la sequía en cada zona.
Distribución por municipios
La respuesta de la Conselleria ha sido rápida y coordinada, logrando llevar agua a un total de 41 localidades en las tres provincias. En la provincia de Castellón, algunas de las localidades que han recibido este recurso vital incluyen Ares, Villafranca, Morella, Cinctorres, y Segorbe, entre otras. La distribución ha sido crucial para áreas rurales donde las reservas de agua se agotaban rápidamente, poniendo en riesgo la vida del ganado.
En la provincia de Alicante, las explotaciones ganaderas de municipios como Castell de Guadalest, Tárbena, Altea y Benissa han recibido cubas de agua para paliar la escasez. En Valencia, los municipios beneficiados incluyen Navarrés, Enguera, Gestalgar y Fontanars, donde la falta de agua estaba comenzando a tener un impacto severo en las explotaciones ganaderas.
Una inversión necesaria para garantizar el futuro
Este plan de emergencia no es solo una medida temporal, sino una inversión estratégica para garantizar la supervivencia del sector ganadero en un contexto de cambio climático y sequías recurrentes. Con una inversión total de 1,4 millones de euros, la Conselleria está asegurando la vida de 76.000 cabezas de ganado en las tres provincias. Esta inversión no solo cubre el costo de transportar el agua, sino que también refleja el compromiso del gobierno regional con la sostenibilidad del sector ganadero.
El impacto de esta sequía ha sido particularmente duro para los pequeños y medianos ganaderos, que dependen de las fuentes de agua locales y carecen de los recursos para adquirir agua de manera independiente en tiempos de crisis. Al proporcionar este apoyo, la Conselleria no solo está ayudando a salvar sus rebaños, sino también a preservar el sustento de numerosas familias que dependen de esta actividad.
Mirando hacia el futuro
Mientras la sequía continúa siendo una amenaza, la necesidad de soluciones a largo plazo se vuelve cada vez más urgente. La distribución de agua es una medida crítica en el corto plazo, pero también subraya la importancia de desarrollar infraestructuras hídricas más resilientes y de implementar políticas que protejan al sector agrícola y ganadero frente a futuros desafíos climáticos.
El conseller Barrachina ha señalado que la respuesta del gobierno regional es solo el comienzo de una serie de acciones necesarias para enfrentar la nueva realidad climática. El apoyo continuado al sector ganadero será fundamental no solo para superar la actual crisis, sino también para adaptarse a un entorno donde las condiciones extremas se están convirtiendo en la norma.
En resumen, la distribución de 7 millones de litros de agua a las explotaciones ganaderas de la Comunitat Valenciana es una acción vital que está salvando vidas y sustentos. Esta medida, aunque costosa, es esencial para garantizar que el sector ganadero, una parte fundamental de la economía regional, pueda resistir y adaptarse a los desafíos del cambio climático.
