En Valencia, las instalaciones deportivas municipales se renuevan para brindar un mejor servicio a la ciudadanía. En esta ocasión, la Junta de Gobierno Local ha aprobado una inversión de casi 2,9 millones de euros para la rehabilitación de dos importantes espacios acuáticos: la piscina de Benicalap y la piscina del Parc de l’Oest. Estas reformas incluyen actualizaciones en zonas de vestuarios, sistemas de maquinaria e ingeniería, con el objetivo de optimizar la experiencia del usuario y asegurar un mantenimiento más sencillo y sostenible.
Un proyecto con una inversión significativa
Las obras previstas en ambas instalaciones tienen un plazo de ejecución de seis meses. La inversión total asciende a 2.873.365,94 euros, con un presupuesto de 1.263.306,05 euros para la piscina de Benicalap y 1.610.059,89 euros para la del Parc de l’Oest. Esta inversión es un esfuerzo conjunto para modernizar las áreas de piscinas y mejorar el rendimiento energético, asegurando una gestión eficiente y sostenible.
Benicalap, una piscina con historia y necesidad de modernización
La piscina de Benicalap, construida en 1983, es un ícono dentro de su parque de 80,000 metros cuadrados. Durante décadas, ha sido un destino favorito para los residentes de Valencia, ofreciendo atracciones acuáticas como toboganes multipista, zonas activas de agua y un parque infantil. Con el tiempo, estas instalaciones requieren una puesta a punto integral, que en este proyecto se traduce en una serie de intervenciones técnicas de gran alcance.
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Entre las actualizaciones más importantes se encuentran la renovación de los vestuarios y aseos públicos, la reparación de cubiertas y fachadas, y el reemplazo de todo el sistema de revestimiento del vaso de la piscina. Además, se renovará el equipamiento general de la piscina y de las salas deportivas adyacentes. Con esta mejora, los usuarios disfrutarán de una experiencia renovada en un entorno cómodo y moderno.
Parc de l’Oest: eficiencia y modernidad en cada rincón
La piscina del Parc de l’Oest también será objeto de una importante remodelación. Este parque, que es bien conocido por sus tres toboganes ondulantes y zonas de juego para todas las edades, contará con una renovación completa de sus maquinarias e ingenierías. Se modernizarán los sistemas de climatización, protección contra incendios, electricidad, agua y gas, dotando a la piscina de una infraestructura técnica de vanguardia.
La intervención incluye también la renovación de los vestuarios, asegurando espacios modernos y funcionales, adaptados a las necesidades de los usuarios actuales. Esta obra supone no solo una mejora estética, sino un esfuerzo por hacer las instalaciones más sostenibles y de fácil mantenimiento.
Sostenibilidad y eficiencia: el objetivo de las reformas
El compromiso de la ciudad de Valencia con la sostenibilidad es evidente en cada uno de estos proyectos. La renovación de estas piscinas tiene como finalidad reducir el impacto ambiental, optimizando el uso de los recursos y mejorando la eficiencia energética de cada instalación. Además, se busca ofrecer una experiencia de alta calidad a los usuarios, con áreas comunes renovadas y equipamientos de última tecnología que faciliten su mantenimiento y gestión.
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Las reformas también suponen una apuesta por la accesibilidad, al asegurar que todos los espacios, como los vestuarios y las zonas de baño, sean accesibles para personas con movilidad reducida. La prioridad de la ciudad es ofrecer instalaciones inclusivas y sostenibles, con mejoras que impacten positivamente tanto en la comunidad local como en el medio ambiente.
Un nuevo capítulo para las instalaciones deportivas de Valencia
Con esta inversión, la ciudad no solo moderniza sus instalaciones acuáticas, sino que también demuestra un compromiso con la calidad de vida de sus ciudadanos. Las piscinas de Benicalap y Parc de l’Oest, dos espacios emblemáticos, renacen con esta intervención que les permitirá seguir siendo el centro de recreo y deporte de generaciones futuras.