El Ayuntamiento de València está listo para aprobar el ambicioso proyecto de regeneración urbana y renaturalización de las avenidas Pérez Galdós y Giorgeta, una intervención que promete mejorar la calidad de vida en la ciudad. Con una inversión total de más de 32 millones de euros, la actuación busca no solo revitalizar el entorno urbano, sino también contribuir a mitigar los efectos del cambio climático mediante la creación de zonas verdes y la mejora de la infraestructura peatonal y ciclista.
El proyecto será aprobado mañana, viernes, en la Junta de Gobierno Local, marcando el inicio de un proceso que transformará estas avenidas en un eje verde y sostenible para la ciudad.
Un proyecto integral para la movilidad y el medioambiente
Con un trazado de 2,2 kilómetros, que abarca desde el paseo de la Petxina hasta la calle Sant Vicent Màrtir, este plan propone una mejora sustancial en la movilidad y la accesibilidad de la zona. Entre las principales intervenciones destacan la ampliación de aceras, la creación de carriles bici segregados y la introducción de nuevas áreas verdes y sistemas de drenaje sostenible.
La empresa encargada de la redacción del proyecto, GECIVAL, S.L., en colaboración con Cercle Territorio Paisaje y Arquitectura COOP., ha planteado una solución que combina la modernización del entorno urbano con una fuerte apuesta por la renaturalización de las avenidas. El objetivo es claro: crear un espacio más amable y seguro para peatones, ciclistas y usuarios del transporte público, a la vez que se promueve un entorno urbano más sostenible.
Zonas verdes y biodiversidad en el corazón de València
Una de las propuestas más destacadas del proyecto es la introducción de zonas verdes y líneas de arbolado que no solo embellecerán las avenidas, sino que también contribuirán a mejorar la calidad del aire y reducir la temperatura en los meses más calurosos. La avenida Pérez Galdós contará con jardineras y arbustos que aprovecharán la sombra de los árboles, mientras que la avenida Giorgeta será decorada con alcorques que se repetirán cada 9 metros, generando un espacio más agradable para los peatones.
En la mediana, se mantendrán las palmeras existentes, que se complementarán con la plantación de árboles piramidales, permitiendo una mejor integración de la vegetación sin interferir con el tráfico.
Un nuevo carril bici y mejoras en la movilidad
El nuevo carril bici bidireccional y segregado será otro de los grandes logros de esta intervención. Con una anchura de 2,50 metros, garantizará la seguridad de los ciclistas, especialmente en las intersecciones más transitadas. El proyecto también contempla la reducción de las paradas de EMT, de 17 a 14, para mejorar la eficiencia del transporte público, y asegura carriles de 3,20 metros para los autobuses y taxis.
Los carriles para vehículos privados tendrán una anchura de 3 metros, respetando los estándares de movilidad, pero sin dejar de priorizar a los peatones y ciclistas, que serán los principales beneficiarios de este nuevo diseño.
Sostenibilidad y mejora de servicios urbanos
El proyecto no solo se centra en la estética y la movilidad, sino también en la mejora de los servicios urbanos. Se implementarán nuevas redes de colectores de aguas residuales y pluviales, así como la reubicación de pozos para garantizar una correcta gestión de los recursos hídricos. Además, se ampliará la red de hidrantes de incendios para garantizar la seguridad, con un hidrante cada 200 metros aproximadamente.
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Los semáforos serán renovados y adaptados con tecnologías de vanguardia, como sistemas acústicos, Bluetooth y descontores, para garantizar un cruce accesible para todas las personas.
Un proyecto financiado por los fondos NextGenerationEU
La regeneración de las avenidas Pérez Galdós y Giorgeta no sería posible sin el apoyo de la Unión Europea, que ha financiado parte del proyecto a través de los fondos NextGenerationEU. Con una aportación de 8 millones de euros, esta actuación se enmarca dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), cuyo objetivo es impulsar zonas de bajas emisiones y fomentar un modelo de ciudad más sostenible y resiliente.
Los espacios verdes, los sistemas de drenaje sostenible y la nueva infraestructura ciclista contribuirán a hacer de València una ciudad más ecológica y preparada para enfrentar los desafíos del cambio climático.
Equipamiento accesible y pensado para la comunidad
Además de mejorar la movilidad y la sostenibilidad, el proyecto contempla la instalación de equipos de ejercicio físico para personas mayores, áreas de juegos infantiles y aparcamientos para bicicletas, promoviendo un estilo de vida más saludable y sostenible para los residentes.
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Todos estos elementos estarán diseñados con materiales naturales y durables, en línea con el compromiso del proyecto de crear un entorno urbano que respete el medioambiente.
Un cambio para la ciudad y sus habitantes
En resumen, la regeneración de las avenidas Pérez Galdós y Giorgeta es mucho más que una simple remodelación urbana. Es un paso hacia la creación de una València más sostenible, accesible y preparada para enfrentar los retos del futuro. Con este proyecto, el Ayuntamiento no solo mejorará la infraestructura de una de las arterias más importantes de la ciudad, sino que también promoverá un cambio de mentalidad hacia un urbanismo más verde y amigable con el medioambiente.
